El camino lo escribimos todos y nuestras huellas se van quedando impresas en el tiempo, nos matizan la memoria, se reproducen casi en cualquier hueco. De todo lo que somos, si nos queda un poco qué perder, lo perdemos todo entonces y nunca por convicción. Así, escribimos con los pies, en cada paso, un cuento nuevo, una pesadilla vívida, un duelo irreprensible, un poema repetido.
Hace tiempo abrí mi ventana y empecé a escribir sin luz, me nutrí del frío; no importa, con el tiempo abandoné a mi soledad, comprendí que el mundo se extendía hacia el interior de mí si dejaba la ventana abierta, y me he acostumbrado ya a la oscuridad.

jueves, 21 de enero de 2010

AL OTRO LADO...

…esperamos el minuto exacto
pero nuestras alas son
de pétalos de viento y
noche
se pulverizan sus colores
de sol al amanecer
sus arcoíris rojos y nocturnos
y flotamos lejos
como ceniza de carne primitiva
bailamos con el aire antes de volver
canciones de olvido
música de gritos de mujer.

1 comentario:

  1. buenos escritos.. tus publicaciones en Poetas me han traido hasta aquí.. ahora dejo deleitar a mis ojos y pensamientos con tus letras.. cariños compañero!,,

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